Una lesión laboral puede cambiar la vida de su víctima en un segundo. En un instante, usted se encuentra no solo con la agonía física de una lesión y el costo de la cura médica, sino también la incapacidad de trabajar. Quizás usted ha escuchado que puede solicitar los beneficios de la indemnización al trabajador para cubrir sus costos mientras se recupera, pero puede ser que dude que sea la opción correcta.
Desafortunadamente, aun si estos beneficios fantásticos son disponibles para todos los trabajadores lesionados, algunas personas deciden no reportar su lesión laboral o pedir los beneficios de la indemnización al trabajador porque temen ser echados o castigados de otra manera si lo hacen.
La protección contra las represalias
Por suerte, hay leyes en los Estados Unidos que proveen un cierto nivel de protección para los trabajadores lesionados que aprovechan del sistema de compensación al trabajador.
Por ejemplo, hay una ley estatal que se llama The Retaliatory Employment Discrimination Act (REDA) que da a un trabajador la capacidad de denunciar a su empleador a una organización gubernamental por castigarlo por haber solicitado los beneficios de la indemnización al trabajador (enlace en inglés).
Tipos diferentes de castigo y de represalias
Las represalias no tienen que resultar en la pérdida de su trabajo para que usted pueda usar esta protección. Hay muchas formas en que un empleador puede violar esta ley.
Por ejemplo, negar un aumento u otro privilegio que se amerita el trabajador como forma de castigo por haber reportado su lesión laboral también es ilegal bajo esta ley. Es una buena idea consultar a un abogado para ver si su situación individual califica como una represalia ilegal.
Nadie debería tratar de esconder su lesión laboral sin beneficiarse del programa de indemnización al trabajador por miedo de represalias de parte de su empleador. Estas leyes existen para que todos puedan recibir la ayuda que necesitan después de su accidente.