Durante un accidente de tráfico, la cabeza y la cara son zonas vulnerables a las lesiones. Incluso con airbags, este riesgo no desaparece por completo. De hecho, los airbags pueden causar lesiones faciales.
Al ser la parte más protuberante de la cara, la nariz es la que suele recibir el impacto. En casos graves, se puede sufrir una fractura de nariz. Esto no solo es doloroso en sí mismo, sino que puede provocar complicaciones a largo plazo. A continuación se describen algunos aspectos que hay que tener en cuenta:
Dificultades respiratorias
Aunque respirar es una actividad automática, depende de ciertas partes del cuerpo, especialmente de la nariz, para funcionar de manera eficiente. Una fractura de nariz puede provocar graves dificultades respiratorias, sobre todo si no se busca atención médica a tiempo. Esto incluye problemas respiratorios tanto cuando la persona está consciente como cuando duerme.
Mayor riesgo de infecciones
En algunos casos, las personas que se han roto la nariz son más propensas a contraer infecciones. Estas pueden variar desde infecciones leves hasta infecciones sinusales moderadas e incluso casos graves de meningitis.
Hemorragias nasales crónicas
A menudo, las hemorragias nasales son relativamente leves y desaparecen en pocos minutos. Sin embargo, también pueden ser graves y difíciles de detener. Una persona que se ha fracturado la nariz tiene más probabilidades de sufrir hemorragias nasales graves que provocan una gran pérdida de sangre.
Si ha resultado lesionado en un accidente automovilístico causado por negligencia, es posible que tenga derecho a una indemnización. En tal caso, le convendrá buscar asesoramiento de alguien con experiencia en el campo de ley de lesiones personales.

